También es una forma en la cual los abusadores buscan cierto grado de «reconocimiento» en el ámbito donde están sometiendo a la humillación un sujeto que supuestamente «lleva las de perder» y/o grupo con el cual converge. Y ello, lamentablemente, puede ser alentado por los hábitos que un chico recibe en su casa o en otros medios (en menor proporción) y que se demuestra a través de un factor muy importante en la educación no formal:,.
Lamentablemente el «bullying» es un factor que no se toma en cuenta y se tiende a minimizar por parte de algunas autoridades escolares – profesores y directores – donde, en el mayor de los casos, es que se producen este tipo de abusos debido a la convivencia de un tercio del día de semana en la cual los mismos alumnos se ven las caras y hacen diversas actividades juntos. Asimismo, los padres suelen obviar dichos problemas y los chicos y chicas, víctimas de ello, callan porque no se les atiende debidamente y para evitar más problemas.
Los "agresores" pueden descontrolarse y dejar secuelas
Las consecuencias según si uno es «abusador» o «abusado» pueden variar: desde ser prepotente, intolerante o abusivo por un lado, o depresión, falta de autoestima, desconfianza, revanchismos e inclusive buscar el mismo suicidio por el otro. El problema se agrava cuando ello es alimentado por otras personas cercanas que tildan dicha tortura diaria, en muchos casos, como si fuese algo poco relevante enrostrándoles que hay otras personas con peores problemas en la actualidad.
Una educación inclusiva desde la raíz de los hogares y de las escuelas tiene que hacernos luchar contra el abuso de menores entre ellos mismos ya que ello no intervenir en dicho problema perjudica a diversos actores de la sociedad (tanto abusadores como abusados) en aprender y/o desaprender conductas en torno a la tolerancia y a la convivencia.
Las consecuencias de no enfrentar adecuadamente al «bulling», incluso, pueden desencadenarse en ciertos actos delictivos cuando estos niños son menores (tal como hemos visto al comienzo) y/o inclusive cuando éstos alcancen la mayoría de edad. Y ojo, las cicatrices que dejan en el alma y muchas veces en el cuerpo este fenómeno del «bullying», a sus víctimas, pueden que no se sanen con mucha facilidad a pesar del paso del tiempo.
Dile no al "Bullying"
Asi que si ven a un menor o menores abusando de otros incúlquenles el respeto al otro y de la riqueza presente en cada persona. No dejemos que la inocencia sea una excusa de la pesadilla en vida que un chico o chica puedan tener. A su vez urge trabajar en espacios que influyan a mitigar los efectos del «bullying» y que ello se remita a la sociedad, en general, con índices de violencia que desciendan en nuestra realidad. No esperemos que otro chico quede parapléjico para enterarnos que es «bullying».
El Secretario General de dicha comuna, Luis Fernando Beleza Saez, menciona que las irregularidades, las cuales son descritas por Marleny Nuñez y no por la Sra. Villagómez, no son reales y que el texto difiere demasiado respecto a la interpretación que se le da. Aqui les mostramos las dos hojas de la carta que Belleza le mandó a Villagómez en su condición de funcionario distrital (puede ampliarlas al cliquear en las imágenes).
Primera cara de la carta (ampliar)
Segunda cara de la carta (ampliar)
Pero lo más lamentable es lo que el funcionario manifiesta en el último párrafo:
«Atendiendo a lo expuesto exhortamos a su representante y administradora de la red, a evaluar el contenido de la información que se comparte, en aras de evitar que los involucrados tomemos acciones legales de mayor envergadura«.
Ahora resulta que si tienes una queja y se la haces conocer a la gente, a través de las redes sociales, eres objeto a ser amenazado por la autoridad de turno; si tienes un foro y a la autoridad de turno no le gusta la opinión de uno de sus aportantes; o crees que no hay respuestas a las preguntas pertinentes que uno le hace a la autoridad, simplemente te amenazan con acciones legales. Un acto recontra abusivo, despiadado y torpe que demuestra qué tan bajo han caído las autoridades miraflorinas.
«¿Por qué los barristas suben a Internet todo este registro audiovisual incriminante? Porque para ellos es normal. No pasa nada: es lo cotidiano. Nadie los sanciona por eso. Viven en la impunidad absoluta. Mientras no exista una real conciencia de que esto debe parar, mientras los sociólogos con corazoncito futbolero sigan jugando de perdonavidas, mientras otros crean que el servicio militar es la panacea para chicos sin oportunidades, mientras los demás creamos que apretar un link en Facebook es suficiente compromiso ciudadano, más Marías Paolas serán aventadas de más cousters. Como diría el cántico: lo pongo en Youtube y qué chucha va a pasar.»
Hemos visto el caso de Maria Paola Vargas y la violencia citadina en un post de la semana pasada y luego de algunos comportamientos y actitudes de algunos actores involucrados en dicha tragedia tengo algunas ideas en mente.
1. La noticia y las acciones dependen de la clase «socioeconómica» de la víctima.
Banderola de la Protesta del Viernes Pasado
La primera impresión es que tuvo que pasarle una tragedia a una familia de «clase socioeconómica media alta», que tienen acceso y las facilidades necesarias para reclamar sus derechos, para poner de nuevo el tema en la agenda pública y descubrir que hay muchas más víctimas de las barras bravas. Lastimosamente, en esta ciudad, ya habían ocurrido asesinatos y daños a terceros ocasionados por dichos grupos pero no se había hecho nada al respecto.
Inclusive ya habían casos de barristas e inocentes muertos pero ello no fue pretexto para que los medios ni las autoridades ni los clubes deportivos resuelvan los casos como debe de ser.
Aquí presentamos un informe especial de Rosa Vallejos, de algunos casos de delitos cometidos por barras bravas, para PantelCanal5.
Otra preocupación es que bastante gente ilusa cree que mandar a los integrantes de las barras bravas al servicio militar obligatorio soluciona el problema. No hay nada más falso. Lo único que haría eso es darle a dichas personas mayores facilidades para ejercer la delincuencia, acceso a armas de mayor alcance y mayores facilidades de rebajar a sus víctimas bajo la idealización del sometimiento para conseguir resultados. Por eso, todo servicio militar debe de ser voluntario.
Entre las barrabazadas dichas está la del Presidente Alan García quien le pide a la policía «perdigonear» a los barristas que ocasionen desmanes. En pocas palabras, quiere que el policía deje de ser la autoridad que tiene el monopolio de la violencia a rebajarlo a que sea un mero matón armado. Sus declaraciones por cortesía de noticiasnorte.
Ya que habla de perdigones...
Dos cosas: 1) deben de darse las facilidades para que la policía opere efectivamente (con lo cual puedan captar pruebas de los vándalos, puedan detenerlos y que no salgan impunemente) y 2) a problemas complejos deben de haber soluciones complejas y una respuesta matonesca, como la que da el presidente, sólo enerbará conflictos e impulsará la desconfianza de la policía nacional haciéndola una «pandilla legal» ante los ojos de cualquier barra brava.
Ojo que hay mucha gente que comparte la visión matonesca de García… lamentablemente.
3. Iniciativa a rescatar: Salvador Heresi (y los alcaldes distritales) y el combo pro-empadronamiento
Hablando de soluciones complejas Salvador Heresi, alcalde de San Miguel, ensaya una propuesta interesante ayudando en el empadronamiento de los hinchas de San Miguel comenzando por los hinchas de Sporting Cristal. (Cortesía tvnetperucom)
Saludo esta iniciativa porque brinda beneficios que los mismos barristas deberán apreciar para que tengan herramientas que contribuya a mejores condiciones para vivir y porque los incentiva a salir del anonimato para adoptar su verdadera identidad la cual los responsabiliza como ciudadanos de sus actos.
4. Castañeda y su «conmigo no es»
Entre los participantes de la protesta hubo una persona que tuvo unas declaraciones muy interesantes… vía Peru.com
Manifestante: «(…)Lo importante es que esto sirva para que las cosas cambien porque es un tema de barras, por otro lado es del desorden del transporte público y todas estas que siempre han ido ocurriendo y es una buena oportunidad para que cambie de raíz (…) para ayudar a las personas a que no les ocurra.»
Luis Castañeda Lossio
Interesante. También teniendo en cuenta que las barras bravas no sólo implican un tema de seguridad sino también de transporte público, ya que se mueven por distintas avenidas en un viaje interdistrital hacia su destino (el estadio), e incluso, yo diría, de planificación urbana (la gente de las urbanizaciones de Covima y de Santa Patricia en el distrito de La Molina entiende lo que digo ya que tuvieron que enrejar sus calles después de que se haya construído el Estadio Monumental). ¿No es eso competencia también del alcalde provincial de Lima?
Es por eso que me pregunto… ¿Que dijo Castañeda?… retomando sus declaraciones para RPP dijo lo siguiente:
Sobre el caso:«Se necesita firmeza, no dejemos que eso prospere (…). No es posible que salgan a la calle a matar, que violen propiedades y que la gente tenga que esconderse para que no deterioren sus propiedades».
Sobre el Perdigoneo:«Es decisión política del Ministerio del Interior».
Concluyo: «Lo que puedo decir que si hay que sancionarlos duramente, hagamos cumplir la ley».
Caricatura de Silva
O sea, que feo, que pena… conmigo no es. ¿No debería promover la seguridad debida o la coordinación para una movilización adecuada de los hinchas teniendo en cuenta que dicho evento reune gente fanática que incluso se refugia en la barra brava? Dichas declaraciones no hacen más que ratificar el desentendimiento del alcalde de Lima en la seguridad ciudadana y en el transporte, sobretodo en sus competencias en los límites distritales y en las avenidas interdistritales que conectan diversos distritos de la capital.
5. Las dirigencias de los mayores clubes peruanos son mediocres
El más pordiosero de los dirigentes (aunque no esté vigente es una clara muestra): Alfredo Gonzales
Al final las barras bravas terminaron siendo consecuencia de la pobredumbre de dichos clubes.
Conclusión
Barra Brava de la U contra policía
No estamos aprendiendo que aquello que afecta a otros puede llegar a afectar a uno mismo. Hay una fuerte combinación entre la desigualdad de unos y otros y la indiferencia entre distintos grupos sociales que componen la ciudad de Lima y ello se vé reflejado en el accionar de nuestras autoridades y en la repercusión de la noticia en distintos medios de comunicación.
La mayor muestra de nuestra indiferencia es darle a un alcalde provincial, que se desentiende de dichos problemas, una aprobación del 81%.
Aquí desde Lima - Perú escribiendo lo que me apetece políticamente escribir hasta que halle un lugar en el tiempo mejor para vivir. Este es Bobsparz, el blog es Caviar de Cianuro, espero que les guste y puedan aprender algo de aquí.