Pueden decir lo que quieran de Alberto Pizango, el líder indígena de la étnia «shawi» de AIDESEP, pero nadie puede negar que es una «figura polarizante«. Hay gente que simpatiza con los nativos y sus causas y cree que Pizango ha cumplido su función de líder indígena defendiendo el estilo de vida de la gente en el amazonas y, por otra parte, están quienes lo acusan de haber perpetrado la masacre de Bagua personalizando, a él, como artífice de todo lo que ha ocurrido y que desató en ese lamentable suceso que todos conocemos como el Baguazo.
Personalmente, yo creo que el cargo de «apu» le quedó muy grande y que desatinó al añadir «más torpeza» de la que el gobierno ya había propiciado. Podemos increparle que no fue capaz, mediante su liderazgo, de crear reglas claras para respetar la vida de terceros en las protestas o de avalar el bloqueo carreteras y ríos… pero de ahí a decirle que él fue quien directamente mató a los policías me parece un exceso.
Pero veamos las posiciones pro y contra de Pizango. Primero veamos a aquellos simpatizantes que fueron a recibirlo al aeropuerto, al llegar a Lima antes de ser retenido por la policía, por cortesía de Peru.com.
Y es que Pizango ha sido retenido y luego liberado… ¿y quienes estaban en contra de la liberación del líder de AIDESEP? Los deudos de los policías fallecidos tanto en el bloqueo de la Curva del Diablo como en la ejecución injustificada de policías, por parte de algunos nativos, en la Estación Seis. Las imágenes por cortesía de Danae.
Dos posiciones extremas. Unos que lo aplauden sin ver el grado de descontrol que su llamado a la insurgencia originó (idolatrando a un ídolo de barro) y otros que lo quieren ver en las rejas con sed de venganza (y no de justicia). Ambas posiciones no quieren ponerse en los «zapatos de los otros» (salvo honrosas excepciones), se niegan mutuamente y siempre están justificando sus posiciones con un «pero» discursivo que más suena a imposición, de unos sobre los otros, que a comprensión… lo cual hace, también, un difícil escenario para reconciliar a ambos sectores de la sociedad.
Ni AIDESEP es indolente con los deudos de los policías, debiendo retirar al cuestionado líder amazónico de su dirigencia y facilitar las investigaciones acerca de quienes fueron los verdaderos asesinos de policías; ni los familiares quieren comprender que hay culpables que si tuvieron relación directa con la muerte de policias y que los nativos también sufrieron pérdidas de vidas y heridos baleados por la misma policía.

Haga click en la foto para leer el Informe en Minoría de la Comisión Lombardi sobre los hechos ocurridos en Bagua
La acusación se personalizó en el líder nativo para que otros culpables, dentro del gobierno, justifiquen las barrabasadas que cometieron y la gente tenga una cabeza que colgar. A Pizango, probablemente, se le pueda acusar de negligente, pero asesino no pudo haber sido.
Pd. Recomiendo leer el Informe de Minoría de la Comisión Lombardi sobre los hechos ocurridos en Bagua.