Hemos tenido horrorosas memorias acerca del primer quinquenio aprista. Una de las consecuencias graves que trajo ese gobierno fue el «copamiento partidario». Lamentablemente en la actualidad se sigue produciendo esa lamentable irregularidad en los diferentes organismos estatales los cuales priorizan el personal partidario, sin importar su eficiencia, desmereciendo a verdaderos profesionales en los diferentes rubros. Desde el primer gobierno de Alan García las instituciones estatales se deterioraron convirtiéndose en núcleos de favores partidarios en vez de cumplir funciones efectivas para la cual la institución estatal ha sido creada.
El copamiento tuvo también como consecuencia un déficit económico del estado de $1`700 millones de dólares en 5 años, ya que al colocar a los partidarios apristas en el aparato estatal (que son 44mil compañeros), incrementaron número de empleados estatales a 67% tal como nos lo recuerda Fritz Du Bois en su editorial de hoy en Perú 21.
El caso del Banco de La Nación es una clara muestra de cómo se prioriza gente partidaria, que no tiene preparación, para que consigan puestos de trabajos bien altos y remunerados. Ese es el caso de Benigno Chirinos (ex-senador aprista), Elías Grijalva, César Larrauri (hijo de la secretaria de Alan García), Roxana Yeny Rosales (prima de la ministra de Vivienda, Construcción y Saneamiento), Zoila Bocangel Calvo y Brucy Carpio Príncipe. Si bien se manifiesta que alguno de ellos son despedidos que deberían reincorporarse ya que han sido sacados arbitrariamente en la época fujimontesinista, esta gente también impulsó el copamiento partidario y entorpecieron las labores de las entidades estatales desprestigiándolas y haciéndolas muy burocráticas y la verdad no sé hasta qué punto merecen volver a trabajar en el mismo rubro en el cual han estado anteriormente. Desde ese primer gobierno aprista es muy difícil conseguir gente efectiva en varios puestos de estado que requieren personal con cierta especialización en materias de alta competencia.
Bonus Track: He aquí una entrevista que Agustín Mantilla (ex-ministro del Interior del primer gobierno aprista) le ofrece a César Híldebrandt Chávez de www.ocholocos.com donde dice algunas cosas contradictorias y otras reveladoras a comienzo del mes de Marzo del 2009.
«Es necesario la reconstrucción del partido. Este partido reconstruido debe ser más insertado en el gobierno. El Apra ganó las elecciones. Al Apra le corresponde más participación en el gobierno.[…] (¿O sea, más Ministerios?) Si, y más militantes y técnicos del partido y creo que están dejados de lado y estoy seguro que el Presidente de la República va a iniciar un proceso de mayor presencia del partido en el gobierno. En este momento es mínimo»
Agustín Mantilla
Cuatro cosas: 1) Ese sujeto es un delincuente que, si no «traicionó» al APRA como tanto dicen en Alfonso Ugarte, entonces fue de nexo entre las altas esferas del Apra y el Fujimontesinismo haciendo que Abel Salinas hiciese campaña presidencial con la plata de todos los peruanos (en el mejor de los casos). 2) Hay apristas que juran que es un mártir de su partido y que tuvo que sacrificarse para mantener al partido en pie. 3) Con lo que reveló y con lo que ocurre es posible que ejerza algún poder dentro del partido en el momento actual. 4) El Apra ha demostrado que no tiene los cuadros necesarios para estar en una buena parte de ministerios y pone a gente ineficiente en diversos sectores del aparato estatal en la actualidad, lo cual significa que espera una política de copamiento partidario aprista.
Du Bois también nos recuerda que el presidente del Banco de la Nación, Humberto Meneses, tenía contactos con Alberto Quimper ya que ambos se encuentran hablando en un “multiaudio” que si bien esto no prueba nada ilícito ello puede ser algo para tomar en cuenta ya que nos da a conocer las facilidades que tenía el ex funcionario de Perú-Petro.
La verdad es que estamos hartos del mal funcionamiento de los entes estatales a causa de la cleptocracia que se está presentando en el Banco de la Nación. Asimismo pasa en la APCI, en FONCODES, en CEPLAN, en el Poder Judicial entre otros. Pareciera que todo esto es un programa partidario-estatal y que de esa manera los apristas están pagando favores de campaña. Es como si nada más y nada menos estos hubiesen hecho un programa especial para condicionar la política en las instituciones y se creara un «programa partidario-estatal Mi Compañero».
De hecho debe de haber en esa «agencia de empleo» (que dice ser partido político) gente preparada y capaz (muy pocos supongo), pero al copar el aparato de gobierno con incapaces y al no hacer nada respecto a ese problema sólo debilita el estado y hará sacar en algún momento a justos y a apristas tal como el fujimontesinismo lo hizo. Es por ello que el copamiento crea inestabilidad laboral.
Tan incapaces son los militantes apristas que copan el Banco de la Nación que han transferido erróneamente a una señora de Bagua la módica suma de 533 millones de soles. Agradezcamos la honestidad de la dama que recibió el dinero y del policía que la ayudo porque esa bestialidad le pudo costar bastante al Perú ya que toda esa plata era fondos del estado.